5 feb 2009

Gracias a los taurinos profundizaremos la lucha antitaurina





El diario venezolano El Meridiano publicó el pasado 04 de febrero de 2009 un artículo tipo ensayo escrito por un tal “El vito” que sinceramente es digno de risa, no había leído algo tan absurdo en mucho tiempo. Realmente, el cerebro de los taurinos es como tres veces inferior al cerebro de una estrella de mar (ups! Pero si las estrellas de mar no tienen cerebro!! Bueno, ustedes entienden xD).

Quiero dedicarme a desmontar ciertas cosas del artículo que me llamaron enormemente la atención, pero antes sería bueno que lo lean para que saquen ustedes sus propias conclusiones, aquí les dejo dos enlaces en donde sale el mismo artículo para que lo verifiquen:

Muy bien, ahora mi parte:

En este foro internacional taurino, hablan de los animalistas como “grupos imbecilizados que pretenden socavar el equilibrio ecológico convirtiéndose en insensatos predadores y aniquiladores de preciadas especies, tal y como ocurriría, sin que lo pretendan inteligentemente, con el milenario toro”. Según esta cita, los antitaurinos son los antiecologistas y los que atentan contra la vida del toro; hablan del “milenario toro”, pero lo que no aclaran es que el toro es un animal doméstico, o sea que realmente no cumple ninguna función ecológica específica, estamos hablando de un animal que ha sido manipulado por intervención humana desde hace más de tres siglos, que ha perdido en gran parte sus instintos salvajes y de supervivencia, haciéndolo bastante dependiente del humano. Esto quiere decir que si el toro de lidia se extinguiera no habría implicaciones ecológicas.

Por otro lado, la implicación moral de torturar públicamente a un animal, ante los ojos de cientos de niños vulnerables a ser marcados psicológicamente por esta incesante violencia, es una de muchas razones para estar en contra de las corridas de toros.

El toro de lidia es una víctima inocente y cualquiera preferiría no nacer si sabe que la supuesta razón de su vida es ser torturado y masacrado para satisfacer una desequilibrada diversión.

Uno de los expositores del foro, Francis Wolff, utilizó unos argumentos realmente paradójicos en su defensa a la tauromaquia: “Una vez me preguntaron si me gustaban los animales y contesté que depende. No me gustan los ratones, sí mi cachorro y el lobo me da miedo, pero todo depende de lo que sea gustar. Puedo sentir afecto por mi gato, pero a mi gato no le gustan las pulgas. Nosotros también somos animales, pero con una diferencia, que es la ética. Los hombres nos ponemos reglas a nosotros mismos”. Es interesante esta respuesta porque utilizó la palabra “ética” para defender su postura. Según la real academia, ética se define como “Conjunto de normas morales que rigen la conducta humana” lo que nos lleva también a la palabra moral, la que significa “Ciencia que trata del bien en general, y de las acciones humanas en orden a su bondad o malicia”, ahora bien, ¿tiene algo de ético el sufrimiento? ¿La diversión por la tortura se ajusta a la moral? Yo no lo creo…

Otro argumento interesante de Wolff fue: “Sí, claro, si no sería una barbarie, pero el combate es leal, el toro tiene la oportunidad de herir, incluso matar”. Me atrevo a decir que esto es completamente falso, puesto que la relación de muerte entre el toro y el torero va de 40.000 toros muertos a 1 solo torero; personalmente, creo que la pelea sería realmente “leal” si los toreros no usaran espadas, banderillas, picadores y demás. Quisiera retar a los toreros a que se atrevan a igualar la pelea a ver si pueden matar a un toro de lidia a mano limpia (de igual forma, yo siempre querré que el toro gane).

Según El Vito, otro de los ponentes, Víctor Gómez Pin, hizo menciones de Darwin y de otros científicos. No sé si sea ignorancia por parte de Gómez Pin citar a Darwin y no sé realmente en qué contexto pudo haberlo citado, pero me gustaría que los lectores dieran por enterado que Charles Darwin era animalista y vegetariano y que el jamás pudo haber apoyado este tipo de barbaries disfrazadas de arte y convertidas torpemente en cultura.

Darwin, en su libro El Origen del Hombre sostuvo que "no hay diferencia fundamental entre el hombre y los mamíferos superiores en cuanto a sus facultades mentales". Darwin señala que "es obvio que los animales inferiores, al igual que el hombre, sienten placer y dolor, felicidad y miseria. La felicidad nunca se exhibe tan claramente como cuando juegan juntos animales jóvenes, tales como los gatitos, los cachorros, los corderos, etcétera, al igual que nuestros propios hijos". De hecho, Darwin en El Origen del Hombre, también dice que la compasión a los demás animales es una de las últimas adquisiciones morales que ha obtenido el ser humano durante su evolución.

El Vito continúa su artículo afirmando que “ La Tauromaquia es la expresión de las raíces más profundas de la cultura latina”, esta afirmación verdaderamente da asco si se analiza desde el punto de vista histórico y antropológico. Nuestras verdaderas raíces son las indígenas, raíces que crecieron a través de un sinfín de sincretismo cultural cuando nos mezclamos con los africanos y los europeos, hasta que el latino se hizo a si mismo como una raza distinta a sus propias raíces. Por excelencia los latinos son apasionados, luchadores, aguerridos y amantes de la vida. Tenemos nuestras propias costumbres y tradiciones, costumbres que nacieron en nuestras tierras y crecieron cuando el latino empapó al mundo con su eminente presencia. Conservamos mucho de nuestros antepasados indígenas, quienes a pesar de tener una dieta omnívora, no comían más de lo que necesitaban ni mataban por diversión, mantenían un equilibro casi perfecto con la naturaleza, no se adueñaban de la tierra sino que se entregaban a ella, reconociéndose a si mismos como sólo otra manada más de mamíferos. La tauromaquia jamás representará nuestras raíces porque el latino no es un predicador del sufrimiento, el latino es llama de vida.

Otra aberrante oración de El Vito con respecto a la tauromaquia es que ésta, según él, es “la sublimación de valores fundamentales de la condición humana que han entrado en crisis en la sociedad actual”. Si torturar un animal hasta matarlo exalta los valores humanos, entonces ser humano representaría una vergüenza ante las demás formas de vida, estoy de acuerdo que los valores humanos han entrado en crisis, pero justamente las corridas de toros simbolizan parte de esa crisis espiritual que sufre la población humana.

El Vito prosigue aseverando que “la cría del toro, elemento básico del espectáculo, se decanta por su natural ecologismo como una gran defensa de los ecosistemas diversos donde se ejerce, tanto en América como en Europa”, honestamente no sé cómo criar los toros de lidia defiende los ecosistemas, pero si algo es seguro es que la ganadería en todas sus formas, es de las prácticas humanas más contaminantes a nivel rural; las ganaderías intensivas y extensivas dañan irreparablemente muchos suelos fértiles y muchos productores exterminan por completo a los posibles depredadores locales del ganado para no tener pérdidas económicas, no creo que la cría del toro de lidia se aleje mucho de esta realidad.

La hipocresía se hace cada vez más grande cuando el autor dice “consideramos que quienes se juegan la vida ante el toro, para expresar y provocar así hondos sentimientos, son intérpretes de un ritual apoyado en normas éticas basadas en el respeto máximo al animal”. Sin comentarios sobre esto, simplemente impresionante ese argumento, casi parece que lo dice bromeando…

Es obvio que el razonamiento taurino se desfasa completamente de los valores morales ideales en una comunidad humana, es inconcebible cómo aún en el siglo XXI existen personas que disfruten la tortura de los animales, los animalistas siempre nos regiremos por una muy sabia frase de Gandhi “La grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser juzgados por el modo en el que se trata a sus animales”. Las corridas de toros no sólo influyen en el sentimiento animalista, hablamos de una expresión pseudo-cultural que inyecta apatía e indiferencia por la vida. Existe un severo retraso cultural en las sociedades humanas, las cuales se manifiestan indudablemente en el trato que todos, como humanos, le damos a los animales: Corridas de toros, peleas de gallos, peleas de perros, coleos, circos con animales silvestres y exóticos, ganadería cárnica y experimentación con animales, son algunas de las demostraciones de que el ser humano no es tan civilizado como muchos creen.

Un paso al verdadero desarrollo están en prohibir las corridas de toros y educar a las comunidades para que entiendan que lo que tiene máscara de arte no es más que un reflejo de nuestra gran ignorancia como seres humanos.

Por otra parte, el taurino siempre representará una de las más bajas condiciones que puede llegar a tener una persona, mientras que el torero siempre representará una de las más bajas condiciones que puede llegar a tener la mierda.

Aquí les dejo un enlace sobre un buen trabajo de las corridas de toros, enfocada desde el punto de vista animalista, vale la pena leerlo:

1 comentario:

* dijo...

Te felicito sinceramente, es uno de los mejores ensayos que he tenido el gusto de leer xD
Tienes muchisima razón no creo ke tenga nada mas ke agregar siempre he tenido ke soportar las impertinencias tan faltas de logica y raciocinio de el tal "Vito" ese sobre la satisfaccion que siente por la degradación y la muerte... ese tipo es un enfermo ya era hora de ke alguien estupidizara su "trabajo" con el arma mas poderosa: El conocimiento...
De verdad te felicito muchos exitos :)